Travelling the way: Ejercicio #6 - Escribe un portarretrato

Escoge una fotografía. Puede ser una de las que tienes en tu scrapbook, y si no, hojea en alguna revista o periódico hasta que veas una persona que te interese -no alguien que conozcas, pero sí un extraño cuya cara o actividad atrae tu imaginación. (No ignores los anuncios, más seguido de lo que nos pueda gustar, los modelos escogidos para este trabajo tienen caras que se acercan a nuestros propios sueños y aspiraciones).

*Escribe acerca de este personaje. Escribe todo lo que puedas pensar del mismo. Describe como él o ella se ven y qué es lo que está pasando en la foto; pero también siéntete libre de inventar vidas pasadas, psicologías, incluso conversaciones para tu personaje. Sigue escribiendo. Si escribes cosas que te contradicen o confunden, o que te sientas mal por haberlas plasmado, no te detengas, no taches y no corrijas nada.

*Lo que estás tratando de explorar aquí, como en el ejercicio anterior, no es en sí el arte de crear personajes ficticios (aunque inevitablemente sea parte de ello) sino de lo que está pasando en tu propia imaginación, y cómo se refleja en lo que escribes. ¿Por qué esta foto te atrae más que otras? ¿Estás usando al personaje para escribir alguna parte de tí o de tu vida?

Como lo he dicho antes, cuando hayas escrito por 15 minutos, detente. Lee lo que has escrito una vez y luego guárdalo en un lugar seguro. Si estás escribiendo con la mano o imprimiendo tu trabajo es muy útil que unas la foto y la hoja donde escribes con un pin o un clip, para que después puedas mirar de manera más crítica a los dos juntos. Pero si esto no es posible, entonces deja una nota que escribiste que te indique dónde encontrar la foto en caso de que la necesites otra vez.

Variaciones de este ejercicio

Si el personaje de las fotos no te asombró lo tanto como para hacer este ejercicio. Una buena manera de hacerlo es recurriendo a portarretratos o personajes de pinturas.

Los grandes pintores ya habrán encontrado o luchado por encontrar la relación entre sus modelos (los que posan para la pintura) y su propia creatividad, para luego intentar expresarlo en su propio medio: la pintura. En este sentido no estarás trabajando enteramente solo, sino que lo harás en compañía de la creatividad de otra mente y ojos.

Este ejercicio es particularmente interesante si te gusta el arte moderno y directo (abstracto).

Escribir sobre un picasso, por ejemplo, o tratar de ver a quien posa es desafiante, pero puede ser estimulante para tu escritura.

Usando un monólogo

Otra forma de hacer este ejercicio es escribirlo como un monólogo. Imagina lo que los personajes que has escogido dirían sobre ellos mismos. Escribe todo con "YO": "YO estoy acostado en una cama verde, es molestamente fría". O lo que te venga a la mente mientras la mueves a otro cuerpo y ojos diferentes. El escritor ve hacia adentro, pero el personaje ve hacia afuera.

Cuando lo leas a tí mismo después de escribir, trata de ver como y donde tus propios "YO" se mezclan con los "YO" ficticios que hablan a través de tu personaje.

-----------------------------------------------------------------------------------------------

Y bien, esto es todo lo que hay que hacer para este viernes. Recuerden que esta actividad se pospuso hasta hoy lunes, siendo la única vez en que se cambia la fecha de posteo/entrega.

Así que ya tenemos tarea para el viernes. Para los que postearon sus historias, muchas gracias, apuesto a que lo que subieron a este blog, representa una centésima parte de lo que les detonó recordar esas historias. Los recuerdos se hacen presentes y nos traen detalles, que se vuelven más vívidos, trayendo recuerdos, mientras la reacción en cadena se estimula de tal forma que nos pone a escribir.

Para los que no lo han hecho, tendrán sus motivos y los respeto (e insisto): Si por alguna razón no han podido hacerlo, háganmelo saber dejando un comentario en cualquier post o escribiendo(nos) un correo: recuerden que muchos de nosotros, o nos conocemos o mantenemos contacto de forma electrónica y la única forma tangigle de saber si este taller nos interesa o nos vale madre, es notificándolo. El silencio no nos sirve. Ni para escribir, ni para vivir.